Dos años después
soy optimista.
Aunque sólo sea por la sensación
de que ya no nos puede ir mucho peor.
De que ya sólo podemos ir hacia arriba
aunque sólo sea por la inercia del rebote.
Del rebote posterior a la hostia
que nos hemos dado entre todos.
Entre todos y todos a una.
Todos a una y contra una.
Contra una que no es otra
que la cruda realidad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
O-léeee
Ahí está el pistoli, recuperando su blog. A ver si saco el mio de la caverna!!
Enhorabuena por estos versos.
Publicar un comentario